¿Cómo funciona el EMDR?
El EMDR es una técnica o enfoque que permite al psicólogo y paciente trabajar sobre las situaciones, pensamientos, emociones o conducta, tiene un enfoque integrador que aúna elementos de terapia dinámicas, como psicoanálisis, elementos de terapia cognitivos conductuales, psicoeducacion, reestructuracion cognitiva, así como elementos del mindfulness.
¿En qué consiste la terapia EMDR?
Con el EMDR podemos trabajar el que se siente, como procesamos las situaciones… y también nos ayuda a trabajar a nivel de ideas y conductas pero también es importante que trabaja a nivel de sensaciones, emociones y de ideas estructurales de la persona.
Además podemos trabajar con el presente pasado y futuro, empezamos estabilizando a la persona con los síntomas que trae, que es por lo que vienen a consulta y una vez que está hecho, pasamos a ver de dónde viene el problema y si se producen esos síntomas, en definitiva, el pasado y sus experiencias vitales.
Por ultimo trabajamos el futuro, observando las situaciones difíciles que vendrán en el futuro para poder superarlas cuando tengamos que hacerles frente.
¿De cuantas sesiones se compone el EMDR?
Una de las cosas que siempre suelen preguntarnos es el número de sesiones que se necesitan, es un tópico tan común como su respuesta, al trabajar con personas la duración de pende de muchas variables como para poder dar un periodo concreto de tiempo, siempre queremos que sea lo mínimo posible, pero también el necesario.
De las terapias que conocemos es una de las más rápidas por eso es un procedimiento que cada vez demandan más pacientes, y que más psicólogos incorporan en sus centros.
¿A qué tipos de pacientes va dirigida? ¿En qué consiste la Terapia EMDR?
El EMDR al principio estaba dirigido a pacientes que habían experimentado situaciones de estrés postraumático, pero a día de hoy se utiliza en la mayoría de las patologías.
El EMDR trabaja a nivel de ideas estructurales de la persona., pero también a nivel de sensaciones, de emociones, a nivel laboral, personal. También nos permite trabajar una situación que se desea superar o una emoción que tenemos con nosotros permanentemente.
¿En que se diferencias de las terapias convencionales?
El EMDR es que es un procedimiento que integra otros enfoques, lo que nos permite trabajar de una manera más amplia la sintomatología del paciente. Las emociones, sensaciones y conductas son recogidas por este método y esta es la gran diferencia, poder tener una amplia gama de recursos para poder utilizar y ayudar a mejorar al paciente.
Así podemos trabajamos a nivel de ambos hemisferios, el hemisferio más racional y el hemisferio más emocional, realizando el procesamiento cerebral necesario para poder mejorar. Si no que además podemos estabilizar esa sensación de nerviosismo o ansiedad que muchas veces identificamos en el estómago.
Muchas veces nos quejamos de que tenemos ansiedad, e intentamos respirar y pensar que se nos va a pasar. Sin embargo se puede superar el momento puntual, pero no lo que nos genera esa ansiedad. Ese motor que nos genera ese estado permance haciendo que tengamos esas sensaciones de manera constante.
Con el EMDR, se consigue regular el nivel de nervios que genera esa ansiedad, no se trata de controlar esa ansiedad, si no de eliminar la ansiedad que genera los nervios. Sería como poner una tirita en una herida abierta, controlamos la herida, pero no se cura. El EMDR sería poner puntos a esa herida para que deje de doler y aprender técnicas para que sepamos qué hacer si nos caemos y nos producimos otra.
Con el EMDR se consigue que la persona aprenda a controlar las emociones no solo desde la cabeza, si no desde la emoción misma. Conseguimos cambiar la visión de ella misma y sus creencias erróneas, esas mismas ideas que todos nos formamos a lo largo de nuestra vida. Así conseguimos que la persona funcione de manera mucho más saludable, que funcione mejor, que se encuentre mejor.
Con respecto al ejemplo anterior y la ansiedad, la ansiedad en si no desaparece, la ansiedad en si es buena (puedes ver más información sobre la ansiedad aquí) además la ansiedad forma parte del abanico de emociones que sentimos, por lo que sí, te seguirás cayendo y haciéndote heridas pero no sufrirás el dolor que sentías, ya que se aprende a caer bien y cómo reaccionar ante esos síntomas que nos provocan heridas. Lo que conseguimos es que la ansiedad ya no bloquee, y que se es capaz de afrontar las diferentes situaciones que generan malestar, y eso, es definitivo.
En Mi Psicólogo Madrid trabajamos con EMDR ya que los beneficios que aportan al paciente lo justifican. Aun así, si la persona no quiere tratar con este tipo de procedimientos, se pueden utilizar otros, como la reestructuración cognitiva o la terapia cognitivo conductual.